-SU INICIO
Para comenzar esta historia del romanticismo musical, tenemos que ir a Hamburgo, el 7 de mayo del año 1833. Siendo hijo de Johann Jakob Brahms (quien le comenzó a instruir en el mundo musical, ya que era contrabajista) y de Hersika Cristina Nissen, tuvo que soportar pobreza, viviendo en los suburbios de Hamburgo. Pero en 1840 lo lograron meter en clases de piano, destacando al poco tiempo y ganando dinero para mantener a su familia impartiendo clases y tocando en locales.
A partir de los diez años comenzó con recitales de piano en público, sobre todo de música de cámara, llegando tanta su fama que un empresario le dio la oportunidad de hacer una gira por América, rechazada por sus padres. Al poco tiempo comenzó a componer, aunque no fueron un gran éxito.
En 1853 comenzó una pequeña gira de acompañante del violinista Eduard Reményi, pudiendo así conocer a otros compositores como Joceph Joachim (que fue amigo suyo desde entonces) y también a Robert Schumann, siendo este último quien le hizo publicidad a Brahms en su revista de crítica musical.
Tres años más tarde, fallece Schumann, quien le valoró durante su vida, aunque Brahms mantuvo una relación más cercana con su mujer, a quien le enseñaba las partituras antes de que fueran interpretadas en público, aunque a lo largo de este periodo estuvo viajando sin para a Alemania y Francia, como músico de la corte de Dermold, manteniendo, además, un pequeño romance con Agathe von Siebold.
En 1862, con 29 años, se instaló definitivamente en Viena, dedicándose a la composición. La importancia de este compositor comienza a resaltar aquí: se convierte en un destacado de la música del Romanticismo. Su primer éxito aparece con su Réquiem alemán, que le anima a hacer su primera sinfonía, terminándola en 1876 y componiendo otras tres a lo largo de los ocho años siguientes.
Clara Schumann. |
-IMPORTANCIA Y FINAL
A lo largo de la vida ha sido un gran venerador de compositores como Beethoven (modelo de todos los compositores románticos), además de Mozart y Haydn. También guardaba las primera edición de sus obras, que terminaba volviendo a modificar para mejorarlas (ya que era un perfeccionista, rompiendo las piezas que no estaban a la altura de salir a la luz), siendo un gran modelo para compositores futuros, además de denominarse el primer compositor postromántico. También fue un amante de la naturaleza, dando paseos por los bosques que rodeaban Viena, dando caramelos a los niños, siendo así apreciado por sus amigos. Un dato curioso, es que nunca se llegó a casar a lo largo de su vida.
Ya para terminar, sufrió un cáncer de hígado que acabó con su vida el 3 de abril del año 1897, aunque se le denominó un compositor muy importante en su época (aunque ese título era escasamente otorgado para aquel entonces).
No hay comentarios:
Publicar un comentario